lunes, 20 de febrero de 2012

LA PROSA DEL 98: UNAMUNO Y BAROJA

A principios del siglo XX ya no se busca reflejar con exactitud la realidad (como hacían los realistas), sino que interesa más plasmar las experiencias subjetivas y los problemas de conciencia. La prosa se  vuelve impresionista, evocadora, fragmentaria.
Se cultivan la novela y el ensayo, géneros a los que se dota de gran flexibilidad. En la novela hay una gran renovación estilística y formal y caben en ella todos los demás géneros: desde las novelas de 1902 la ruptura con el objetivismo y el realismo es total. En el ensayo la variedad de asuntos (temática existencial, política, historia,...) y de tonos (desde el lirismo a la crítica) posibilitan el cultivo de un género en el que el componente subjetivo es fundamental.
Estudiaremos, entre los prosistas del 98, a Pío Baroja (autor de más de sesenta novelas en las que se alternan personajes abúlicos e inadaptados y personajes aventureros y arrogantes) y a Miguel de Unamuno (novelista y ensayista que refleja en sus obras su personalidad contradictoria). Para ello lee el libro de texto y consulta estos enlaces:
  • Presentación de clase (aquí puedes estudiar también el concepto de "generación" y la significación literaria de estos autores de principios del siglo XX).
  • Kalipedia: La prosa de la generación del 98  (hay entradas sobre Baroja, Unamuno y "Azorín", además de varios artículos e informaciones que tienes en la columna de la derecha).
Leeremos también dos cuentos de Pío Baroja que representan muy bien las obsesiones de estos autores de principios de siglo: "Parábola" y "El reloj"